SI NO QUIERES VIVIR EN LA CONFUSIÓN
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¡ CAMINA CON FE !, ¡ escucha a Dios y sal de ti !
( 1 lectura )
¡ Y camina sin juzgar, sin criticar a nadie DEFENDIENDO siempre A LOS DEMÁS !
( Evangelio )
( Evangelio )
( LUNES XII Semana t.Ordinario )
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¿ Y por qué ? ¿ Por qué esta actitud para el Señor es tan importante e insiste tanto en
aconsejarnos esto ?....
Porque quién juzga se pone en el lugar de Dios y haciendo esto se encamina a una
derrota segura en la vida, porque será correspondido con la misma moneda.
Por eso, el camino de la Fe nos lleva a no vivir en esa tierra de confusión, de hipocresía.
Y nos ayuda a salir precisamente, también, de esa actitud de querer sacar «la paja»
del ojo del hermano ( porque todos somos muy dados a ver los defectos de los demás
del ojo del hermano ( porque todos somos muy dados a ver los defectos de los demás
pero nos encontramos muy ciegos frente a nuestros propios pecados )
Por eso, quien camina con fe no vive preocupado por sacar la paja del ojo ajeno
sino más bien, la «viga» que hay en su propio ojo.
sino más bien, la «viga» que hay en su propio ojo.
Y este es el camino correcto !, ¡ este es ... el camino de Dios !
( 1 lectura )
( 1 lectura )
Por eso, hoy, Jesús insiste:
"Tu procura siempre defender a los demás sin ponerte a juzgar a nadie "
( Mateo 7, 1-5 )
"Tu procura siempre defender a los demás sin ponerte a juzgar a nadie "
( Mateo 7, 1-5 )
Pero Jesús ... ¿ Porque nos dice esto ?, ¿ y por qué tiene tanto interés en convencernos
para que jamás juzguemos a nadie ?.... ¡ Porque es algo importante !
para que jamás juzguemos a nadie ?.... ¡ Porque es algo importante !
Y nos lo repite tantas veces porque juzgar a los demás, ¡ nos lleva a la hipocresía !
¿ Quienes son los «hipócritas» ?.... ¡¡ Quienes se ponen a juzgar !!
Porque la persona que juzga se equivoca, se confunde y se convierte en una persona
derrotada.
¿ De verdad, se equivoca siempre ?.... ¡ Sí ! claro que sí !
¿ Y por qué ?.... Porque se pone en el lugar de Dios, ¡ que es el único juez ! y obrando así
¿ Y por qué ?.... Porque se pone en el lugar de Dios, ¡ que es el único juez ! y obrando así
¡ se equivoca de lugar !
En práctica, quien obra así cree tener el poder de juzgar todo, las personas, la vida, ¡ todo !
Y con la capacidad de juzgar considera que tiene también ¡¡ la capacidad de condenar !!
Es el colmo de los engaños, porque los juicios te alejan de la Fe y te llevan a caminar
en la soberbia y sin humildad.
en la soberbia y sin humildad.
Esta era la actitud que tenían " los doctores de la Ley" ( en la época de Jesús ), que
continuamente juzgaban todo, ocupando el lugar de Dios que es el único juez.
En cambio, Dios, para juzgar se toma tiempo, espera, cosa que el hombre no hace
porque es muy dado a juzgar inmediatamente.
porque es muy dado a juzgar inmediatamente.
Y por eso, el que juzga, ¡ se equivoca siempre ! simplemente porque toma un lugar
¡ que no es para él !
¡ que no es para él !
Pero, no sólo se equivoca ¡¡ también se confunde !!
¿ Y por qué ?.... Porque está tan obsesionado de esa pajilla que ve en el otro, que incluso
¿ Y por qué ?.... Porque está tan obsesionado de esa pajilla que ve en el otro, que incluso
esa pajilla ¡ no le deja dormir !. Y repite en su obsesión «pero yo quiero quitarte esa pajilla»,
sin darse cuenta, sin embargo, ¡¡ que la viga la tiene él !! ¡¡¡ y en su propio ojo !!!
Y quién juzga además confunde la realidad y y es iluso porque ve "la pajilla" ¡ pero no la viga
que hay en su propio ojo !
que hay en su propio ojo !
Peor aún, se «confunde» porque cree que su viga ¡¡ sea esa pajilla !!
Y no sólo también el que juzga, se convierte en un derrotado y puede terminar mal,
¿ y por qué ?.... ¡¡ Porque la misma medida se usará para juzgarle a él !!
¿ y por qué ?.... ¡¡ Porque la misma medida se usará para juzgarle a él !!
Y quién se transforma en un juez soberbio y suficiente, en vez de caminar en la humildad
se equivoca de lugar, porque toma el lugar de Dios ¡ y apuesta por una derrota !
¿ Cuál derrota ? ... La de ser juzgado con la misma medida con la que juzga.
Porque el único que juzga i es Dios ! y aquellos a quienes Dios les da el poder de hacerlo.
¿ Y los demás ?... ¡ Los demás no tienen derecho de juzgar ! por eso hay confusión, y por eso
existe la derrota. Porque quien juzga acusa siempre.
En el juicio contra los demás ¡ siempre hay una acusación !
Exactamente lo opuesto de lo que Jesús hace ante el Padre.
Jesús jamás acusa, al contrario ¡ Jesús defiende !. ¡¡ Él es el primer Paráclito !!
Y después nos envía al segundo, que es el Espíritu.
Jesús es el defensor y está ante el Padre defendiéndonos de las acusaciones.
Jesús es el defensor y está ante el Padre defendiéndonos de las acusaciones.
Pero si existe un defensor, ¡¡ hay también un acusador !!. Y en la Biblia se llama demonio,
satanás.
Jesús juzgará al final de los tiempos, pero en el ínterin intercede ¡ siempre defiende !
Juan, lo dice muy bien en su Evangelio:
"No pequéis, por favor, pero si alguno peca, piense que tiene a Uno que está abogando ante
"No pequéis, por favor, pero si alguno peca, piense que tiene a Uno que está abogando ante
el Padre."
Por eso, si queremos seguir el camino de Jesús, más que acusadores debemos ser defensores
de los demás ante el Padre.
de los demás ante el Padre.
¿ Y entonces que puedo hacer si veo que alguien sufre algo malo ?...
Pues sin pensarlo demasiado, ve a rezar y defiéndelo delante del Padre, como hace Jesús.
Reza por él. Pero sobre todo, no juzgues, porque si lo haces, cuando tú hagas algo malo,
serás juzgado.
En la vida de cada día, cuando te veas con ganas de juzgar y criticar a los demás ....
¡ recuerda esta verdad !
¡ recuerda esta verdad !
Porque quién juzga:
- se equivoca de lugar,
- se confunde
- y se convierte en un derrotado.
- se equivoca de lugar,
- se confunde
- y se convierte en un derrotado.
¡ Quién obra así no obra como Jesús ! que a todos siempre defiende ante el Padre
¡ y es un abogado defensor !
¡ y es un abogado defensor !
¡ Tú defiende siempre y no te equivocaras !. Porque quien juzga, se parece más bien al príncipe
de este mundo, que va siempre detrás de las personas para acusarlas ante el Padre.
Por eso, oremos hoy al Señor para que nos dé la gracia de ser cristianos semejantes a Jesús,
intercesor, defensor, y abogado de todos. Y de no imitar al otro, que vive siempre acusando,
intercesor, defensor, y abogado de todos. Y de no imitar al otro, que vive siempre acusando,
criticando. Porque si tomas ese otro camino que no fue el que tomó Abraham, al final, el maligno,
te destruirá a ti
FRANCISCO I. ( 23 / 6 / 14 )
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