Hoy nos centramos en la búsqueda de soluciones a los conflictos o problemas que nos embriagan de una u otra manera en cualquier faceta de nuestra vida.
¿ Cómo ?
1º.- Aceptando la realidad que vivimos
... Aceptar no es igual a resignación ni inmovilismo. Es reconocer que lo que ha sucedido , ha sucedido, con todo lo que ello implica. Reconociendo que los sentimientos que nos provocan estas vivencias están en nosotros dándonos el permiso de sentirlas.
2º.- Comprender cómo hemos llegado hasta donde estamos, nuestras pautas de comportamiento, nuestras creencias, nuestros hábitos,.....nuestros roles y personajes que desarrollamos y todo aquello que forme parte de nuestra responsabilidad aprender para reaprender para perdonarnos y ponernos en marcha activa.
3º.- Desapegarnos del sufrimiento al que nos sometemos inconscientemente, es decir dejar de mal tratarnos por errores o experiencias vividas y agarrarnos a ello para justificar el inmovilismo, la lástima por un@ mism@ ,...... tomando conciencia que esa actitud solo nos hace daño y que nos merecemos un mejor trato hacia nosotros mismos. Lo que sucedió, sucedió, lo acepto aunque reconozca que no me hace gracia, aprendo de mis errores y me pongo a la búsqueda de soluciones.
4º.- Darnos el permiso de aprender todo lo que necesitemos y buscar, si es necesario, la ayuda ideal para resolver los asuntos.
5º.- Centrarnos en la búsqueda de soluciones, cuando te centras en esta dirección la actitud cambia , apuntamos todo lo que se nos ocurra por muy absurdo que parezca, no juzgamos ni criticamos en ese proceso, simplemente valoramos todas la ideas que nos vengan de nosotros o de otros, ya luego depuramos las iniciativas. Esta actitud nos hace mirar con honestidad las cosas desde otra perspectiva y nos lleva a ponernos en marcha, siendo concientes que podemos tener carencias que hemos de subsanar por el camino, lo cual implica centrarnos en aprender lo que tengamos que aprender para poder resolver las situaciones.
6º.- Constancia, constancia y perserverancia. No esperemos milagros de un día para otro , pongámonos en el camino consciente de centrarnos en las soluciones y aparecerán cuando menos lo esperemos. La desidia, el abandono, la lástima ,..... no nos llevan a ninguna parte más que al hundimiento de uno mismo; así que con todo lo que se sienta, levantemos la cabeza y pongámonos en marcha con nuevos rumbos.
Un saludo y vamos a por ello. Es laborioso pero no imposible , depende del cristal con que lo mires !!!
¿ Cómo ?
... Aceptar no es igual a resignación ni inmovilismo. Es reconocer que lo que ha sucedido , ha sucedido, con todo lo que ello implica. Reconociendo que los sentimientos que nos provocan estas vivencias están en nosotros dándonos el permiso de sentirlas.
2º.- Comprender cómo hemos llegado hasta donde estamos, nuestras pautas de comportamiento, nuestras creencias, nuestros hábitos,.....nuestros roles y personajes que desarrollamos y todo aquello que forme parte de nuestra responsabilidad aprender para reaprender para perdonarnos y ponernos en marcha activa.
3º.- Desapegarnos del sufrimiento al que nos sometemos inconscientemente, es decir dejar de mal tratarnos por errores o experiencias vividas y agarrarnos a ello para justificar el inmovilismo, la lástima por un@ mism@ ,...... tomando conciencia que esa actitud solo nos hace daño y que nos merecemos un mejor trato hacia nosotros mismos. Lo que sucedió, sucedió, lo acepto aunque reconozca que no me hace gracia, aprendo de mis errores y me pongo a la búsqueda de soluciones.
4º.- Darnos el permiso de aprender todo lo que necesitemos y buscar, si es necesario, la ayuda ideal para resolver los asuntos.
5º.- Centrarnos en la búsqueda de soluciones, cuando te centras en esta dirección la actitud cambia , apuntamos todo lo que se nos ocurra por muy absurdo que parezca, no juzgamos ni criticamos en ese proceso, simplemente valoramos todas la ideas que nos vengan de nosotros o de otros, ya luego depuramos las iniciativas. Esta actitud nos hace mirar con honestidad las cosas desde otra perspectiva y nos lleva a ponernos en marcha, siendo concientes que podemos tener carencias que hemos de subsanar por el camino, lo cual implica centrarnos en aprender lo que tengamos que aprender para poder resolver las situaciones.
6º.- Constancia, constancia y perserverancia. No esperemos milagros de un día para otro , pongámonos en el camino consciente de centrarnos en las soluciones y aparecerán cuando menos lo esperemos. La desidia, el abandono, la lástima ,..... no nos llevan a ninguna parte más que al hundimiento de uno mismo; así que con todo lo que se sienta, levantemos la cabeza y pongámonos en marcha con nuevos rumbos.
Un saludo y vamos a por ello. Es laborioso pero no imposible , depende del cristal con que lo mires !!!
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